Crónicas de un vuelo II: Viaje a New York y Cultural Care Training School (I)

¡Ya estoy en New York! La verdad es que está siendo toda una experiencia… no me lo esperaba así, la verdad sea dicha… Lo que si tengo que decir es que, aunque aun es pronto, estoy muy contenta de estar aquí y que tengo muchas ganas de que llegue el día de conocer a mi familia... Mientras tanto, esta semana voy a contaros todo lo que haga. De hecho, eso es lo que voy a hacer.

Momentos antes del despegue del vuelo Madrid-Nueva York

He de ser honesta y decir que soy de las de “consejitos vendo pero, para mí, no tengo…” Solo digo que me muero de vergüenza al admitir que no he sido capaz de hacerme la maleta en condiciones yo sola, y al final mi pobre hermana tuvo que rehacerla entera… Hasta las 3 de la mañana que se tiró la pobre…

Anoche no dormí prácticamente nada, creo que han sido unas 3 horas, y me he despertado antes de que sonara el despertador. Luego, ha venido mi padre a buscarme, y nos hemos ido todos al aeropuerto. Cuando hemos llegado, he ido a hacer el check-in y… ¡sorpresa, SORPRESA! Iba pasada de peso. Así que he tenido que ponerme a sacar cosas de la maleta en mitad del aeropuerto… Un show, vamos. Lo bueno de todo esto es que he sabido desprenderme de las cosas sin hacer un melodrama de ello y he conseguido facturar en el horario previsto. Luego, he cambiado el dinerito y me he ido al control de seguridad…

En el control de seguridad, al pasar, he pitado, y me han hecho un test para ver si llevaba sustancias ilegales. Luego, me han hecho abrir la maleta de cabina para sacar el portátil y volver a pasar el control. Después de esto, me han vuelto a abrir la maleta para ver si llevaba algún objeto cortante o una lima de uñas, y han hecho un test en la maleta para ver si llevaba sustancias ilegales… Que me han visto cara de delincuente, vaya. Al final he conseguido pasar el control, y montarme en el tren que lleva a la terminal T-4S.

¡Mi billete de avión!

Una vez estás allí, tienes que pasar un “control”, en el que tienes que enseñar el billete y el pasaporte. Después de esto, me han dicho a dónde tenía que dirigirme para coger mi avión, y me he recorrido la terminal entera para llegar a la puerta de embarque… Y hemos despegado. Me ha encantado la sensación cuando el avión ha empezado a recorrer la pista al despegar… Y durante el vuelo he estado bastante entretenida, y la comida del avión estaba super rica (también es verdad que anoche no cené y esta mañana no he desayunado… XD). En el vuelo también te entregan la “Declaración de aduanas”. Es un papelito donde tienes que declarar si llevas ciertas cosas en la maleta (como vegetales, dinero, …) Yo lo he hecho mal (como no) y he tenido que pedir otro... Pero me lo han dado sin problemas. También me ha dicho la azafata que no declarase nada porque me iban a hacer pagarlo y que, si me decían algo, me hiciera la inocente.

He llegado a New York sobre las 14h (en España las 20h). Tras esto, ¿a que no sabéis qué? ¡Otro control! Esta si que no os la esperabais, ¿eh? Esta vez ha sido inmigración. El tío ha sido un borde de narices, pero por lo menos hablaba español... Me han tomado las huellas dactilares y me ha sacado una foto, me ha sellado el pasaporte y me ha sellado la declaración de aduanas.

Después de esto, he recogido la maleta de la cinta de equipajes y he pasado otro control, en el que tenías que entregar la declaración de aduanas. Cuando he salido de toda la zona de controles, había un señor esperando con un cartel de "Cultural Care Au Pair". Hemos esperado un momento a que vinieran otras chicas que faltaban, y luego hemos ido a otra terminal a recoger a otras au pairs, y nos hemos ido para la Training School.

Yo solo digo que se me ha hecho más largo el viaje del aeropuerto a la Trinning School que el viaje Madrid- Nueva York... Es que la carretera no tenía fin... Ahora, merece la pena el viaje totalmente... .Es todo taaan verde... Y el clima es fabuloso. Os dejo una foto de las vistas desde la ventana de mi habitación, que una imagen vale más que mil palabras.

Vistas desde mi dormitorio en la Training School, Long Island.

Cuando hemos llegado hemos dejado las maletas en una habitación, nos han asignado un dormitorio y nos han dado unas pequeñas instrucciones mientras cenábamos pizza. Ahora, en cuanto termine de escribir esto, me voy con unas chicas que he conocido a dar un paseo hasta la playa... Esto es maravilloso...

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¡Sed felices!